La Conferencia Virgen de la Luz continúa atendiendo a más de 400 familias. “No queríamos permanecer impasibles ante la situación social de necesidad”.
Desde que se declara el estado de alarma en todo el Territorio Nacional, la Conferencia Virgen de la Luz siente el espíritu vicentino que nos mueve y, a pesar del confinamiento decretado, no queríamos permanecer impasibles ante la situación social de necesidad que estábamos observando, e inmediatamente nos pusimos a trabajar para intentar ayudar dentro de nuestras posibilidades.
Con los más mayores
En el piso de estancia temporal para personas mayores de la SSVP se tomaron las medidas sanitarias para dotar a los trabajadores del Centro del material necesario para protegerlos y proteger a nuestros mayores. Afortunadamente, y gracias a la profesionalidad, entrega y compromiso de los trabajadores, los ancianos, hasta el momento, están limpios del virus, con la esperanza de que Dios nos siga ayudando a que esta situación continúe en la misma tónica.
Con los que luchan por recuperarse de las adicciones
Las personas que tenemos acogidas en proyecto Hombre están siendo atendidos gracias a medios telemáticos, haciéndoles un completo seguimiento. Continúan disfrutando de la ayuda de nuestros psicólogos y terapeutas. Esperamos un desarrollo favorable, que sientan el apoyo necesario en estos duros momentos y que nunca se encuentren solos.
Con las familias que pasan malos momentos
En el Almacén de Alimentos, desde el primer día de confinamiento nos lanzamos a la calle para atender a las familias más vulnerables (lógicamente utilizando todas las medidas sanitarias). Hemos observado un cierto aumento de las familias a atender debido al incremento de las personas desempleadas y a las dificultades por las que atraviesan muchos trabajadores autónomos. Esto ha disparado la solicitud de ayudas de primera necesidad. Entre las familias que atendemos, tenemos muchas con un número elevado de hijos.
Red de caridad
Destacar la gran colaboración y la ayuda incondicional del Banco de Alimentos de Melilla que ha puesto a nuestra disposición todos los medios técnicos para poder llevar a cabo nuestras entregas de alimentos, habiendo atendido hasta el momento a unas 400 familias necesitadas.
Desde la Sociedad de San Vicente de Paúl, llevamos los alimentos hasta el propio domicilio de las familias, contando con el apoyo de todas las instituciones públicas, que agradecen y reconocen la labor que venimos desarrollando desde nuestro almacén de alimentos.
Nos sentimos orgullosos de la labor vicentina que se está desarrollando en Melilla. Estamos tomando algunos riesgos, que asumimos como una forma de servicio a la Sociedad de San Vicente de Paúl.